DESARROLLANDO TU ESPIRITU
Los 7 Muebles del Tabernáculo
Segundo mueble - Lavacro de Bronce
SIERVO - El Lavacro
Exodo 29:4; 30:17‐21; 38:8
Amado, llamo tu espíritu de Siervo al frente a que ponga atención lo que vemos en las escrituras.
Cuando miramos los muebles del Tabernáculo el segundo mueble es el Lavacro de Bronce. El Lavacro de Bronce proveía agua para los sacrificios. Pero quiero enfocarme en el segundo trabajo que es menos importante y era el proveer el agua para lavar a los sacerdotes. Siervo tú también provees agua para lavar a los sacerdotes. Cuando el sacerdote pasaba del Altar de Bronce al lugar Santo, era un requerimiento pasar por el Lavacro de Bronce, y se requería que tomara agua del lavacro, para que se lavara antes que fuera a la Presencia de Dios.
Este es un cuadro increíble del valor y la importancia del rol del Siervo.
La transición entre lo horrible de la Guerra y el contacto con el mundo quebrado y herido al tratar con el pecado y pasar a la intimidad para estar en la Presencia de Dios es una transición que no podemos tomar a la ligera.
Tu Siervo has sido colocado estratégicamente entre el Profeta y el Maestro. Tú estas entre el Altar de Bronce y la Mesa de los Panes. Hay una razón y es la habilidad con que tú facilitas al espíritu para hacer esa transición, de la dureza y crueldad del mundo a la Presencia de Dios. Esto determinará cuanto el espíritu de ellos recibe para poder entran a la Presencia de Dios.
Miremos una ilustración simple. Cuando los soldados israelitas regresaban de la Guerra, ellos eran declarados impuros. Ellos tenían que estar por fuera del campamento por siete días. Y creo que había tres razones:
1.‐ Para una limpieza física, ellos tenían que lavarse cierta cantidad de veces ya descritas. Ellos tenían que limpiarse de todo lo adherido de todas las cosas impuras de la casa de los enemigos y Dios simplemente estaba muy alerta de los servicios higiénicos, no quería que hubiese sangre que pudiera producir enfermedades dentro del campamento por lo que habían adquirido durante la guerra.
2.‐ También creo que había una limpieza emocional en esta transición que se estaba llevando a cabo. Dios quería estar seguro de que todos estos hombres se removieran de rol de guerreros y se vistieran con el rol de padres, antes de sentarse en el comedor, Dios no quería que el hombre carnal se sentara en la mesa y empezaran a ladrarles a los niños.
3.‐ También creo que Dios quería una limpieza espiritual por la contaminación adquirida durante la Guerra siendo necesaria una preparación para entrar del campamento al lugar de intimidad.
Siervo, tú tienes una unción muy alta para servir a los líderes, tú tienes la unción más alta para ayudar a los líderes que tienen dificultad con la toxicidad del mundo y también ayudarlos en la transición a la intimidad con Dios.
Cuando un líder no tiene un Siervo que le ayude a lavar la toxicidad que trae el ministerio, probablemente él no podrá entrar a la Presencia de Dios tan frecuente como lo necesita, ni podrá recibir tanto como debería, y eventualmente la batalla lo doblara y lo devorara.
Así que si tú estás ministrando internamente como un puente entre el Profeta y el Maestro y si tu don primario es Siervo, estas ministrando al Cuerpo de Cristo. Valora tremendamente el rol de la transición ayudando a la transición del líder en los tiempos de guerra a pasar a los tiempos de intimidad. Es un llamado muy noble. Invisible llamado, no he escuchado ninguna enseñanza acerca del sacerdote parándose en el lavacro de bronce, hemos escuchado otras enseñanzas acerca de los otros muebles del tabernáculo, pero esa, aunque se le ha pasado por encima, es extraordinariamente significante e importante porque los sacerdotes primero que todo no eran ni son los basureros para recibir todas las toxinas.
¡Ellos fueron diseñados para ministrar a Dios! Repito, los sacerdotes están diseñados a ministrar a Dios, no a ser un basurero tóxico. Y si el Siervo no ayudaba en esta área y en esta transición con la limpieza, el sacerdote estaría atascado en el trabajo menos importante de sus dos trabajos y no estaría creciendo en el espíritu. Y por lo tanto no podrán conocer a Dios de la manera a que están llamados.
¡Así que Siervo ayuda en esta transición, desata tu naturaleza, tu unción, una de las razones para las cuales fuiste creado que es para ayudar a que el líder no se quede en lo que es menos importante sino para que se acerque a Dios íntimamente y el espíritu crezca en el conocimiento del Dios soberano!
Siervo en el día cuando tú has sido sometido a una gran cantidad de cosa feas y peligrosas, en el día cuando ha habido contaminación por el mundo y lo tóxico alrededor tuyo, tú eres el que puede pararse al frente y gentilmente lavar los escombros y la basura del día de todo el espíritu, para que así se pueda cerrar el día en la Presencia de Dios. Tú puedes cerrar el día para que haya intimidad con Dios, en vez de una Guerra.
Te bendigo Siervo para que encuentres un gozo inmenso y gran dignidad facilitando esa la transición de las trincheras al Trono de Gracia.Tu has sido llamado a esto y se te ha confiado hacer esto.Todo hombre tiene que pasar a través de la obra del Siervo antes que pueda tener, la fiesta maravillosa en La Mesa de los panes.
Te bendigo Siervo y proclamo la dignidad inmensa, te apreciamos y valoramos como un gran tesoro y valoramos el trabajo que haces y hoy te desato y envío para que laves extravagantemente el resto del espíritu para que la intimidad con el Padre colectiva sea mucho más allá de cualquier cosa que hayas conocido antes.
¡Te Bendigo Siervo en el nombre de Jesús de Nazaret que vno com Siervo y lavo los pies de sus propios discípulos!
Cuando miramos los muebles del Tabernáculo el segundo mueble es el Lavacro de Bronce. El Lavacro de Bronce proveía agua para los sacrificios. Pero quiero enfocarme en el segundo trabajo que es menos importante y era el proveer el agua para lavar a los sacerdotes. Siervo tú también provees agua para lavar a los sacerdotes. Cuando el sacerdote pasaba del Altar de Bronce al lugar Santo, era un requerimiento pasar por el Lavacro de Bronce, y se requería que tomara agua del lavacro, para que se lavara antes que fuera a la Presencia de Dios.
Este es un cuadro increíble del valor y la importancia del rol del Siervo.
La transición entre lo horrible de la Guerra y el contacto con el mundo quebrado y herido al tratar con el pecado y pasar a la intimidad para estar en la Presencia de Dios es una transición que no podemos tomar a la ligera.
Tu Siervo has sido colocado estratégicamente entre el Profeta y el Maestro. Tú estas entre el Altar de Bronce y la Mesa de los Panes. Hay una razón y es la habilidad con que tú facilitas al espíritu para hacer esa transición, de la dureza y crueldad del mundo a la Presencia de Dios. Esto determinará cuanto el espíritu de ellos recibe para poder entran a la Presencia de Dios.
Miremos una ilustración simple. Cuando los soldados israelitas regresaban de la Guerra, ellos eran declarados impuros. Ellos tenían que estar por fuera del campamento por siete días. Y creo que había tres razones:
1.‐ Para una limpieza física, ellos tenían que lavarse cierta cantidad de veces ya descritas. Ellos tenían que limpiarse de todo lo adherido de todas las cosas impuras de la casa de los enemigos y Dios simplemente estaba muy alerta de los servicios higiénicos, no quería que hubiese sangre que pudiera producir enfermedades dentro del campamento por lo que habían adquirido durante la guerra.
2.‐ También creo que había una limpieza emocional en esta transición que se estaba llevando a cabo. Dios quería estar seguro de que todos estos hombres se removieran de rol de guerreros y se vistieran con el rol de padres, antes de sentarse en el comedor, Dios no quería que el hombre carnal se sentara en la mesa y empezaran a ladrarles a los niños.
3.‐ También creo que Dios quería una limpieza espiritual por la contaminación adquirida durante la Guerra siendo necesaria una preparación para entrar del campamento al lugar de intimidad.
Siervo, tú tienes una unción muy alta para servir a los líderes, tú tienes la unción más alta para ayudar a los líderes que tienen dificultad con la toxicidad del mundo y también ayudarlos en la transición a la intimidad con Dios.
Cuando un líder no tiene un Siervo que le ayude a lavar la toxicidad que trae el ministerio, probablemente él no podrá entrar a la Presencia de Dios tan frecuente como lo necesita, ni podrá recibir tanto como debería, y eventualmente la batalla lo doblara y lo devorara.
Así que si tú estás ministrando internamente como un puente entre el Profeta y el Maestro y si tu don primario es Siervo, estas ministrando al Cuerpo de Cristo. Valora tremendamente el rol de la transición ayudando a la transición del líder en los tiempos de guerra a pasar a los tiempos de intimidad. Es un llamado muy noble. Invisible llamado, no he escuchado ninguna enseñanza acerca del sacerdote parándose en el lavacro de bronce, hemos escuchado otras enseñanzas acerca de los otros muebles del tabernáculo, pero esa, aunque se le ha pasado por encima, es extraordinariamente significante e importante porque los sacerdotes primero que todo no eran ni son los basureros para recibir todas las toxinas.
¡Ellos fueron diseñados para ministrar a Dios! Repito, los sacerdotes están diseñados a ministrar a Dios, no a ser un basurero tóxico. Y si el Siervo no ayudaba en esta área y en esta transición con la limpieza, el sacerdote estaría atascado en el trabajo menos importante de sus dos trabajos y no estaría creciendo en el espíritu. Y por lo tanto no podrán conocer a Dios de la manera a que están llamados.
¡Así que Siervo ayuda en esta transición, desata tu naturaleza, tu unción, una de las razones para las cuales fuiste creado que es para ayudar a que el líder no se quede en lo que es menos importante sino para que se acerque a Dios íntimamente y el espíritu crezca en el conocimiento del Dios soberano!
Siervo en el día cuando tú has sido sometido a una gran cantidad de cosa feas y peligrosas, en el día cuando ha habido contaminación por el mundo y lo tóxico alrededor tuyo, tú eres el que puede pararse al frente y gentilmente lavar los escombros y la basura del día de todo el espíritu, para que así se pueda cerrar el día en la Presencia de Dios. Tú puedes cerrar el día para que haya intimidad con Dios, en vez de una Guerra.
Te bendigo Siervo para que encuentres un gozo inmenso y gran dignidad facilitando esa la transición de las trincheras al Trono de Gracia.Tu has sido llamado a esto y se te ha confiado hacer esto.Todo hombre tiene que pasar a través de la obra del Siervo antes que pueda tener, la fiesta maravillosa en La Mesa de los panes.
Te bendigo Siervo y proclamo la dignidad inmensa, te apreciamos y valoramos como un gran tesoro y valoramos el trabajo que haces y hoy te desato y envío para que laves extravagantemente el resto del espíritu para que la intimidad con el Padre colectiva sea mucho más allá de cualquier cosa que hayas conocido antes.
¡Te Bendigo Siervo en el nombre de Jesús de Nazaret que vno com Siervo y lavo los pies de sus propios discípulos!