13 TIEMPO Y ESPACIO
AHORA Y EL FUTURO
AHORA Y EL FUTURO
Dios llevó a Abram a Canaán para administrar la tierra para ser el mayordomo de ella, en cambio, el la disfrutó.
Y ..... Su comprensión de la mayordomía era tan borrosa que entregó ilegalmente la mitad de la tierra a su sobrino que tenía una mente anti-mayordomía trabajando todo el tiempo.
Dios estaba molesto con Abram y lo regañó por eso, como tambien Dios no reconocio en lo absoluto la transferencia de la tierra a su sobrino y la tierra siguio perteneciendo a Abram y su simiente.
Además, Dios le pidió a Abram que se levantara de su silla reclinable debajo del roble de Mamre y caminara todo el terreno, revisándolo, observando el activo y el pasivo. Dios quería que actuara como un mayordomo ya que fue llamado a ser mayordomo.
La razon fue que la semilla de Abram tomaría posesión de la tierra, casi medio milenio después.
Jack Welch era famoso por sus "metas extensas" para el siguiente trimestre. La mayoría de las corporaciones públicas tienen que compartir con los analistas financieros sus objetivos económicos para los próximos 90 días. Los funcionarios electos tienen el ciclo electoral de dos años que los fastidia implacablemente. Los planificadores de negocios realmente audaces tienen metas para cinco a diez años.
Pregunta: Entonces, ¿qué haces con un Dios que quiere que actúes en el espacio en el tiempo presente que se este viviendo, con ojo hacia las consecuencias en 400 años, ¿un tiempo muy diferente, verdad?
Respuesta: Lo ignoras como lo hizo Abram, mientras te concentras en los beneficios del tiempo y espacio para que esten alineados en el tiempo presente, O creces y te sincronizas con Él, actuando como un Noble Sujeto, no un consumidor.
Él te dirá lo que quiere que hagas en el tiempo presente que estes viviendo ose "EL AHORA, EL HOY. Él puede que te diga o que no te diga para quién es, o cuándo el fruto de tus acciones se hará visible.
Si solo hacemos lo que tiene sentido en nuestro pequeño marco del tiempo de tres generaciones, entonces estaremos limitando nuestra utilidad al Dios de Toda la Historia.
Copyright Enero de 2018 por Arthur Burk
Y ..... Su comprensión de la mayordomía era tan borrosa que entregó ilegalmente la mitad de la tierra a su sobrino que tenía una mente anti-mayordomía trabajando todo el tiempo.
Dios estaba molesto con Abram y lo regañó por eso, como tambien Dios no reconocio en lo absoluto la transferencia de la tierra a su sobrino y la tierra siguio perteneciendo a Abram y su simiente.
Además, Dios le pidió a Abram que se levantara de su silla reclinable debajo del roble de Mamre y caminara todo el terreno, revisándolo, observando el activo y el pasivo. Dios quería que actuara como un mayordomo ya que fue llamado a ser mayordomo.
La razon fue que la semilla de Abram tomaría posesión de la tierra, casi medio milenio después.
Jack Welch era famoso por sus "metas extensas" para el siguiente trimestre. La mayoría de las corporaciones públicas tienen que compartir con los analistas financieros sus objetivos económicos para los próximos 90 días. Los funcionarios electos tienen el ciclo electoral de dos años que los fastidia implacablemente. Los planificadores de negocios realmente audaces tienen metas para cinco a diez años.
Pregunta: Entonces, ¿qué haces con un Dios que quiere que actúes en el espacio en el tiempo presente que se este viviendo, con ojo hacia las consecuencias en 400 años, ¿un tiempo muy diferente, verdad?
Respuesta: Lo ignoras como lo hizo Abram, mientras te concentras en los beneficios del tiempo y espacio para que esten alineados en el tiempo presente, O creces y te sincronizas con Él, actuando como un Noble Sujeto, no un consumidor.
Él te dirá lo que quiere que hagas en el tiempo presente que estes viviendo ose "EL AHORA, EL HOY. Él puede que te diga o que no te diga para quién es, o cuándo el fruto de tus acciones se hará visible.
Si solo hacemos lo que tiene sentido en nuestro pequeño marco del tiempo de tres generaciones, entonces estaremos limitando nuestra utilidad al Dios de Toda la Historia.
Copyright Enero de 2018 por Arthur Burk